Que
conste que respeto profundamente al votante de un partido democrático sea cual
sea, y sobre todo si son amigos mas allá de lo virtual, pero.
No los
considero responsables de lo que hacen sus votados, tengo y estoy en la
obligación de creer que su voto lo hacen bajo el convencimiento de lo que es
mejor para los ciudadanos, aunque estos ya hayan visto disminuidos sus
derechos, recortados sus salarios y otras cuestiones sociales durante estos
últimos años.
Muchos
piensan que los de Podemos lo que estamos es mosqueados por obtener 71
diputados nada mas, yo digo 71 nada menos, para mi es un buen resultado, aunque
las expectativas eran mas favorables, pero tal como he venido diciendo en
muchos foros, las encuestas pueden estar manipuladas para llamar la atención
del que en esa encuesta iba perdiendo votos, pero no es el caso de lo que
quiero exponer.
El caso
es que si hubiera ganado el Psoe, lo habría entendido, España necesita un
cambio, eso lo han dicho hasta muchos populares, y podía ser una opción válida,
yo no hubiera mostrado la disconformidad con sus votantes, entre otras cosas,
porque dentro de la normalidad el Psoe es un partido consolidado en el país,
aunque en numerosas ocasiones no muestren el socialismo obrero deseado.
Pero,
se que es duro y muchos me dicen que estar imputado no es estar acusado, y
además es así, pero no voy a hablar de los políticos corruptos, no es eso, ni
del aforamiento de Rita para evitar ser juzgada, es que si todo prosigue su
curso, se puede llegar a que el partido que nos gobierna sea legalmente acusado
como organización criminal, y es entonces cuando veríamos que quienes nos gobiernan,
si lo consiguen, pertenecen a una
organización con el nombre manchado, propio de la camorra por hacer un símil.
Y será
el momento en que nos tendremos que callar ante los otros países, cuando desconfíen
de nosotros y de nuestra economía, y cuando nos vean como lo que no somos,
entonces si pasa, que puede ocurrir, no habrá momentos para lamentaciones, pues
para eso existió el pasado 26 de junio.
Salud y
libertad