Aunque los del “niu yor tains” hayan hecho un gran avance periodístico, en el cual hablan de la forma de vida del gaditano, de que si somos capaces de seguir viviendo alegremente pese a los problemas socioeconómicos que padece la ciudad, o incluso en todo el marco de la bahía de Cádiz. Soy un convencido que pese a todo nuestra comarca en general y la ciudad en particular poseen una generosidad casi inigualable, y máxime a sabiendas de los problemas que nos asechan desde allende los tiempos y que reitero lo acaba de descubrir los periodistas americanos.
No se como se han volcado las demás localidades, capitales o comunidades de este país, supongo que deberían de doblegar la solidaridad pues están mas capacitados económicamente que mis queridos y admirados conciudadanos. Cuestión de regla directamente proporcional, tanto tengo tanto debo de ofrecer.
Con respeto a lo que hoy toca, la ayuda al pueblo de Haití desde Cádiz ha sido enorme. El carnaval se ha volcado, los comparsitas han dado lo que han podido y más para que esa ayuda se transforme en dinero y que sirva un poquito más para paliar las graves deficiencias que sufren en el degradado país americano. Dejando bien claro que los carnavaleros no son esos que un burdo “gaditano” denominó de gente capaces de pegarles patadas a los perros y simples meones de las esquinas gaditanas.
Y los cofrades, como era lógico no iban a ser menos, incluso me apresuro que son los que mas aportaciones económicas propias han ofrecido. Donaciones a través de las denominadas bolsas de caridad, actos para recabar dinero o incluso destinar para el país el dinero que se iba a gastar toda una cofradía en el exorno floral el pertinente día de su salida procesional.
Y las aportaciones a través de otras entidades como son los colegios. Que a través de unas octavillas y por poner un claro ejemplo, en el Ceip Erytheia de San Fernando nos pedían una voluntariosa aportación para trasladarla posteriormente a una cuenta de ayuda al pueblo caribeño. Consiguiendo entre los Ceips de la Isla de león una cantidad que ha rondado los treinta mil euros que pararán íntegramente, para paliar en la medida de lo posible, los graves daños que produjo el terremoto.
Como siempre Cádiz a la cabeza de la solidaridad, con mas penas que glorias, y por mas puñaladas que recibamos seguimos siendo los números unos de “to er mundo mundiá”, y el que no diga ole que se le seque la yerbabuena.
Salud y libertad
No se como se han volcado las demás localidades, capitales o comunidades de este país, supongo que deberían de doblegar la solidaridad pues están mas capacitados económicamente que mis queridos y admirados conciudadanos. Cuestión de regla directamente proporcional, tanto tengo tanto debo de ofrecer.
Con respeto a lo que hoy toca, la ayuda al pueblo de Haití desde Cádiz ha sido enorme. El carnaval se ha volcado, los comparsitas han dado lo que han podido y más para que esa ayuda se transforme en dinero y que sirva un poquito más para paliar las graves deficiencias que sufren en el degradado país americano. Dejando bien claro que los carnavaleros no son esos que un burdo “gaditano” denominó de gente capaces de pegarles patadas a los perros y simples meones de las esquinas gaditanas.
Y los cofrades, como era lógico no iban a ser menos, incluso me apresuro que son los que mas aportaciones económicas propias han ofrecido. Donaciones a través de las denominadas bolsas de caridad, actos para recabar dinero o incluso destinar para el país el dinero que se iba a gastar toda una cofradía en el exorno floral el pertinente día de su salida procesional.
Y las aportaciones a través de otras entidades como son los colegios. Que a través de unas octavillas y por poner un claro ejemplo, en el Ceip Erytheia de San Fernando nos pedían una voluntariosa aportación para trasladarla posteriormente a una cuenta de ayuda al pueblo caribeño. Consiguiendo entre los Ceips de la Isla de león una cantidad que ha rondado los treinta mil euros que pararán íntegramente, para paliar en la medida de lo posible, los graves daños que produjo el terremoto.
Como siempre Cádiz a la cabeza de la solidaridad, con mas penas que glorias, y por mas puñaladas que recibamos seguimos siendo los números unos de “to er mundo mundiá”, y el que no diga ole que se le seque la yerbabuena.
Salud y libertad
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1 comentario:
Buenííísimo post Paco.
Además de que todo lo que dices es verdad.
Bsts Rocío.
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