-Don Emilio Quintana: Es el ALTER EGO del loro autor de estas parrafadas, por tanto no puede ser él quien se califique a si mismo, sino que deben ser los demás quienes digan sus virtudes, en caso de que posea alguna. “Amaos los unos a los otros como yo no os he amado”.
-Don Francisco Rodríguez: (Paquito) Su aspecto aniñado le confiere una presencia de cierta simpatía que conjuga con su actitud de continua broma, lo cual repercute a su vez en facilidad para asumir otras actitudes bromistas que descargan sobre él. Digno de exaltación es su cariño por las tradiciones típicamente gaditanas. Frase: “¡Al cielo con él”.
-Don Jesús Pérez: Hombre cuya principal virtud es la confianza en si mismo, pués con ello es capaz de suplir, en algunos casos, la falta de capacidad. Es elogiable su interés por los asuntos sindicales (demostrando que no va de pasota por la vida) y convicción para defender sus derechos. Frase: “¡Quita a ese perro de ahí!”.
-Don Miguel Ángel Ramírez.: Aplausos por su valentía al defender su opción de vida personal en una sociedad todavía tan hipócrita e intransigente. Saber divertirse es una cualidad envidiable, y el posee esa cualidad de saber extraer de la vida muchos momentos de dicha y amenidad. Le pondría una nota alta si se calificara su compañerismo, siempre entendido hacia aquellos que no le muestren hostilidad. Frase: “Viva la pepa”.
-Don Antonio Cruz: Un auténtico caballero de los jardines, lejos su comportamiento de la tosca educación del jardinero tradicional. Su labor desde hace muchos años es la más primorosa, la de reproducir la vida de la flora en las limitadas instalaciones del vivero. Su habilidad manual la lleva más allá de las faenas estrictamente de jardinería. Muy de agradecer también su inquietudes en temas literarios. Frase: “Por la vía Tarifa”.
-Don Rafael Moreda: Posee un enorme espíritu de sacrificio pocas veces valorado con justicia. Su amabilidad en el trato con el trabajador, aunque a veces sea pura estrategia, es de agradecer frente al despotismo que por antonomasia reviste la figura de capataz en cualquier centro de trabajo. La vida y la jardinería van unidas en él pues desde la adolescencia disfruta y sufre entre flores y plantas; por ello le conviene la siguiente frase: “Está sembrao”.
-Don Juan Carlos Cruz: Persona de gran formalidad y buena disposición para el trabajo que consigue un aceptable equilibrio entre el cumplimiento de su deber y la defensa de sus derechos. Su labor es multifuncional debido a la confianza que inspira a los jefes para ciertas tareas. Es el trabajador tradicional que realiza su profesión pensando en su familia. Frase: “Un padre de familia”.
-Don Manuel Cepero: Realiza bien su labor profesional sin necesidad de humillarse, sino dosificando el esfuerzo según las circunstancias y necesidades. Hombre de trato cordial y que no emplea habitualmente un lenguaje grosero, haciendo muestra por el contrario de buenas formas de expresión. No es frecuente en él las muestras de enfado o de resentimiento. Frase: “ Ni un pelo de tonto”
-Don Fernando Almerón: Es digno de aplauso como ha capeado con arte de estirpe torera las embestidas que ha tratado de darle la vida y como ha sabido apartarse de caminos cenagosos que el destino quería que pisase. Ha sabido labrarse contra viento y marea una sólida posición profesional, cuyo techo en mi opinión aún no ha tocado. Actúa con la astucia del protagonista de novelas de picaresca española. Frase: “¡Ole tus cojones!”
-Don Manuel Alejo. Su oronda figura lo reviste de la imagen bonachona que poseen las personas regordetas, pero además, esta primera impresión se corrobora en la realidad de su carácter, del que afloran buenos sentimientos. Se le observan ciertas dotes de mando y organización, y tras su rostro de amistosa seriedad se esconde el alma entrañable de chirigotero. Frase: “Yo no soy el señor Barriga”
-Don Juan García: D. Juan se comporta de una forma que es particular, muy suya, y siempre es elogiable la actitud independiente. Ha demostrado tener profundos conocimientos sobre tauromaquia, más que algunos críticos intelectuales de radio y televisión. Además tiene el carisma de aquellas personas que a pesar de los muchos defectos son recordados con cierto cariño. Frase: “Convidaos Los unos a los otros como yo no os he convidao”.
-Don Santiago González: Se desenvuelve con gran discreción, bajo la cual guarda la dinamita que emplea contra el malage de turno que siempre menoscaba la nobleza. Sin necesidad de aspavientos, sabe hacer respetar sus derechos, y realiza su trabajo ordenadamente, apartado de la forma atropellada de aquellos que son desbordados por los nervios. Frase: “Vísteme despacio que tengo prisa”.
-Don Pedro Guerrero: Jardinero clásico que domina a buen nivel todas o la gran mayoría de las variantes de la profesión. Su trabajo no es un mero pasatiempo sino un deber en el que deposita todo su interés para la perfecta realización. La jardinería traspasa el horario del centro de trabajo y se extiende por horas de ocio y por fines de semana, si es necesario, como muestra el gran arraigo que tiene en D. Pedro su oficio. Frase: “¡Un valdepeñas con casera!”
-Don Gaspar (apellido). De nuevo una personalidad independiente, contraria al borreguismo y que se resiste a ir como la gente que va detrás de Vicente. Además de su labor de conductor, su afición y dedicación profesional por la mecánica demuestran una inequívoca habilidad manual. Frase: “Mas bonito que un S. Luís”
-Don José Aparicio. Mezcla de fornido y abnegado trabajador rural y de señorito educado de capital. Es buen administrador financiero, posee larga resistencia en el ejercicio de las faenas propias de la profesión, y su afán de superación promete que en el futuro se hagan realidad sus aspiraciones de mejora. Sabe ejercer sobre si mismo un control y organización por encima de lo normal. Frase: “Emilio la cervechita a la una de la tarde”.
-Don Francisco Marín. Fuera de la tensión y responsabilidad de las horas de trabajo, D. Paco es una persona afable, incluso propicia para alternar un rato de copitas de forma amena. Es un operario en el que se puede depositar la confianza necesaria en faenas delicadas y a pesar de su edad aún tiene arrestos para quemar generosamente sus calorías en faenas duras. Frases: “Echa la basura en el tenedor”.
-Don Jesús Iglesias: Persona bien dotada de facultades físicas que él utiliza en un derroche de fuerzas sin racanería en faenas de todo tipo. Tiene valor polivalente su aportación laboral, pués además de su constitución física es persona voluntariosa, asume riesgos ante retos nuevos y posee destreza natural en manualidades como la mecánica. Sabe además lo que quiere y a pesar de ser trabajador no se deja nunca arrastrar. Frase: “Donde esté yo que se quite Rambo”.
-Don Manuel Debén. Conductor servicial que facilita mejor que ninguno de la maniobrabilidad del camión para su mejor carga. Es persona sencilla que gusta de cosas sencillas, y su carácter representa al de la buena mkvt8rgente de barrio, al colegui con el que se estrechan lazos de camaradería. Frase: “Precaución, amigo conductor”.
-Don Miguel Puerta. Persona muy trabajadora que abarca muchas especialidades de la jardinería. En el momento preciso sabe hacer un paréntesis para la relajante copita o cervecita que sirve para convertir en más llevadera la jornada laboral. Frase: “Le debo al Loro 1000 pesetas”.
-Don José Mena: La maldad no tiene sitio en su forma de ser en ningún momento. No margina nunca a los demás, abriendo afectuosas puertas de amistad y guardando el rencor en el olvido. Profesionalmente tuvo el arte de ascender de categoría en un tiempo muy corto de aprendizaje, mucho antes que envidiosos frustrados. Frase: “Viva izquierda unida”
-Don Jerónimo Almagro. Prestigiosos sociólogos de las universidades de Oxford, Cambridge, Harvard y Massashusets investigan actualmente para descubrir el lado bueno del Sr. Almagro. Frase para el goteo: “gota a gota y cobro porque me toca”.
Me despido deseando sinceramente unas felices fiestas, y recordando que si a pesar de la coba que os he dado hay algunos que quieren quitarme del medio, solo pido que le digáis a mi viuda que los papeles del seguro de vida y del Ocaso están en el lado izquierdo, del cajón derecho, de la fila segunda, del mueble situado al fondo del todo; allí los encontrará junto a la cajita de Viagra.
Fdo: EL LORO PELOTA.
-Don Francisco Rodríguez: (Paquito) Su aspecto aniñado le confiere una presencia de cierta simpatía que conjuga con su actitud de continua broma, lo cual repercute a su vez en facilidad para asumir otras actitudes bromistas que descargan sobre él. Digno de exaltación es su cariño por las tradiciones típicamente gaditanas. Frase: “¡Al cielo con él”.
-Don Jesús Pérez: Hombre cuya principal virtud es la confianza en si mismo, pués con ello es capaz de suplir, en algunos casos, la falta de capacidad. Es elogiable su interés por los asuntos sindicales (demostrando que no va de pasota por la vida) y convicción para defender sus derechos. Frase: “¡Quita a ese perro de ahí!”.
-Don Miguel Ángel Ramírez.: Aplausos por su valentía al defender su opción de vida personal en una sociedad todavía tan hipócrita e intransigente. Saber divertirse es una cualidad envidiable, y el posee esa cualidad de saber extraer de la vida muchos momentos de dicha y amenidad. Le pondría una nota alta si se calificara su compañerismo, siempre entendido hacia aquellos que no le muestren hostilidad. Frase: “Viva la pepa”.
-Don Antonio Cruz: Un auténtico caballero de los jardines, lejos su comportamiento de la tosca educación del jardinero tradicional. Su labor desde hace muchos años es la más primorosa, la de reproducir la vida de la flora en las limitadas instalaciones del vivero. Su habilidad manual la lleva más allá de las faenas estrictamente de jardinería. Muy de agradecer también su inquietudes en temas literarios. Frase: “Por la vía Tarifa”.
-Don Rafael Moreda: Posee un enorme espíritu de sacrificio pocas veces valorado con justicia. Su amabilidad en el trato con el trabajador, aunque a veces sea pura estrategia, es de agradecer frente al despotismo que por antonomasia reviste la figura de capataz en cualquier centro de trabajo. La vida y la jardinería van unidas en él pues desde la adolescencia disfruta y sufre entre flores y plantas; por ello le conviene la siguiente frase: “Está sembrao”.
-Don Juan Carlos Cruz: Persona de gran formalidad y buena disposición para el trabajo que consigue un aceptable equilibrio entre el cumplimiento de su deber y la defensa de sus derechos. Su labor es multifuncional debido a la confianza que inspira a los jefes para ciertas tareas. Es el trabajador tradicional que realiza su profesión pensando en su familia. Frase: “Un padre de familia”.
-Don Manuel Cepero: Realiza bien su labor profesional sin necesidad de humillarse, sino dosificando el esfuerzo según las circunstancias y necesidades. Hombre de trato cordial y que no emplea habitualmente un lenguaje grosero, haciendo muestra por el contrario de buenas formas de expresión. No es frecuente en él las muestras de enfado o de resentimiento. Frase: “ Ni un pelo de tonto”
-Don Fernando Almerón: Es digno de aplauso como ha capeado con arte de estirpe torera las embestidas que ha tratado de darle la vida y como ha sabido apartarse de caminos cenagosos que el destino quería que pisase. Ha sabido labrarse contra viento y marea una sólida posición profesional, cuyo techo en mi opinión aún no ha tocado. Actúa con la astucia del protagonista de novelas de picaresca española. Frase: “¡Ole tus cojones!”
-Don Manuel Alejo. Su oronda figura lo reviste de la imagen bonachona que poseen las personas regordetas, pero además, esta primera impresión se corrobora en la realidad de su carácter, del que afloran buenos sentimientos. Se le observan ciertas dotes de mando y organización, y tras su rostro de amistosa seriedad se esconde el alma entrañable de chirigotero. Frase: “Yo no soy el señor Barriga”
-Don Juan García: D. Juan se comporta de una forma que es particular, muy suya, y siempre es elogiable la actitud independiente. Ha demostrado tener profundos conocimientos sobre tauromaquia, más que algunos críticos intelectuales de radio y televisión. Además tiene el carisma de aquellas personas que a pesar de los muchos defectos son recordados con cierto cariño. Frase: “Convidaos Los unos a los otros como yo no os he convidao”.
-Don Santiago González: Se desenvuelve con gran discreción, bajo la cual guarda la dinamita que emplea contra el malage de turno que siempre menoscaba la nobleza. Sin necesidad de aspavientos, sabe hacer respetar sus derechos, y realiza su trabajo ordenadamente, apartado de la forma atropellada de aquellos que son desbordados por los nervios. Frase: “Vísteme despacio que tengo prisa”.
-Don Pedro Guerrero: Jardinero clásico que domina a buen nivel todas o la gran mayoría de las variantes de la profesión. Su trabajo no es un mero pasatiempo sino un deber en el que deposita todo su interés para la perfecta realización. La jardinería traspasa el horario del centro de trabajo y se extiende por horas de ocio y por fines de semana, si es necesario, como muestra el gran arraigo que tiene en D. Pedro su oficio. Frase: “¡Un valdepeñas con casera!”
-Don Gaspar (apellido). De nuevo una personalidad independiente, contraria al borreguismo y que se resiste a ir como la gente que va detrás de Vicente. Además de su labor de conductor, su afición y dedicación profesional por la mecánica demuestran una inequívoca habilidad manual. Frase: “Mas bonito que un S. Luís”
-Don José Aparicio. Mezcla de fornido y abnegado trabajador rural y de señorito educado de capital. Es buen administrador financiero, posee larga resistencia en el ejercicio de las faenas propias de la profesión, y su afán de superación promete que en el futuro se hagan realidad sus aspiraciones de mejora. Sabe ejercer sobre si mismo un control y organización por encima de lo normal. Frase: “Emilio la cervechita a la una de la tarde”.
-Don Francisco Marín. Fuera de la tensión y responsabilidad de las horas de trabajo, D. Paco es una persona afable, incluso propicia para alternar un rato de copitas de forma amena. Es un operario en el que se puede depositar la confianza necesaria en faenas delicadas y a pesar de su edad aún tiene arrestos para quemar generosamente sus calorías en faenas duras. Frases: “Echa la basura en el tenedor”.
-Don Jesús Iglesias: Persona bien dotada de facultades físicas que él utiliza en un derroche de fuerzas sin racanería en faenas de todo tipo. Tiene valor polivalente su aportación laboral, pués además de su constitución física es persona voluntariosa, asume riesgos ante retos nuevos y posee destreza natural en manualidades como la mecánica. Sabe además lo que quiere y a pesar de ser trabajador no se deja nunca arrastrar. Frase: “Donde esté yo que se quite Rambo”.
-Don Manuel Debén. Conductor servicial que facilita mejor que ninguno de la maniobrabilidad del camión para su mejor carga. Es persona sencilla que gusta de cosas sencillas, y su carácter representa al de la buena mkvt8rgente de barrio, al colegui con el que se estrechan lazos de camaradería. Frase: “Precaución, amigo conductor”.
-Don Miguel Puerta. Persona muy trabajadora que abarca muchas especialidades de la jardinería. En el momento preciso sabe hacer un paréntesis para la relajante copita o cervecita que sirve para convertir en más llevadera la jornada laboral. Frase: “Le debo al Loro 1000 pesetas”.
-Don José Mena: La maldad no tiene sitio en su forma de ser en ningún momento. No margina nunca a los demás, abriendo afectuosas puertas de amistad y guardando el rencor en el olvido. Profesionalmente tuvo el arte de ascender de categoría en un tiempo muy corto de aprendizaje, mucho antes que envidiosos frustrados. Frase: “Viva izquierda unida”
-Don Jerónimo Almagro. Prestigiosos sociólogos de las universidades de Oxford, Cambridge, Harvard y Massashusets investigan actualmente para descubrir el lado bueno del Sr. Almagro. Frase para el goteo: “gota a gota y cobro porque me toca”.
Me despido deseando sinceramente unas felices fiestas, y recordando que si a pesar de la coba que os he dado hay algunos que quieren quitarme del medio, solo pido que le digáis a mi viuda que los papeles del seguro de vida y del Ocaso están en el lado izquierdo, del cajón derecho, de la fila segunda, del mueble situado al fondo del todo; allí los encontrará junto a la cajita de Viagra.
Fdo: EL LORO PELOTA.
Salud y Libertad
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