Si es que no para de dar la nota con tanta intransigencia, primero con el temita del desnudismo el cual ha colocado a esta ciudad en primera línea de intolerancia y ahora con el de la megafonía de la Caleta.
Resulta que Juan un trabajador del servicio de playa contratado por el ya conocido empresario burgalés Arasti Barca, ha sido amonestado por este mismo por el mero hecho de hacer mejor su trabajo. Y digo mejor porque el no tenía obligación de amenizar con un poco de humor las jornadas playeras en La Caleta. Y no es que se pusiera a contar chistes usando el megáfono, es que a las informaciones le ponía una coletilla, sin más historias raras que como ha salido en la prensa. “Son las seis de la tarde….. la hora de la merienda”.
Claro está que quien dirige la playa es el Ayuntamiento gaditano, el cual ya ha demostrado como se dirige en la moral mas extrema, en la rectitud de las personas y en tratamientos rellenos de pulcritud. Y el empresario que realiza los servicios de la empresa es el antes mencionado empresario que ya dijo en una entrevista que no le simpatiza la ciudad, pues ya ha sufrido en sus carnes denuncias sindicales las cuales le habrán servido para que se de cuenta que el látigo negrero solo valió para que Kunta Kinte se llamara Toby. Aunque visto lo visto debe de estar corroído por dentro y rebuscar por donde sea para llamar la atención a un trabajador de Cádiz.
Pues aquí tenemos la unión de la intransigencia y de lo que no consideran moral, con la falta de simpatía hacia lo gaditano. Y mientras seguiremos en boca de todos por las continuas prohibiciones, prohibido ponerse en pelotas en Cortadura y prohibido contar chistes en La Caleta.
Y eso que vamos a conmemorar el dos mil doce, ¿Qué ocurrirá a partir del dos mil trece?
Salud y libertad
Resulta que Juan un trabajador del servicio de playa contratado por el ya conocido empresario burgalés Arasti Barca, ha sido amonestado por este mismo por el mero hecho de hacer mejor su trabajo. Y digo mejor porque el no tenía obligación de amenizar con un poco de humor las jornadas playeras en La Caleta. Y no es que se pusiera a contar chistes usando el megáfono, es que a las informaciones le ponía una coletilla, sin más historias raras que como ha salido en la prensa. “Son las seis de la tarde….. la hora de la merienda”.
Claro está que quien dirige la playa es el Ayuntamiento gaditano, el cual ya ha demostrado como se dirige en la moral mas extrema, en la rectitud de las personas y en tratamientos rellenos de pulcritud. Y el empresario que realiza los servicios de la empresa es el antes mencionado empresario que ya dijo en una entrevista que no le simpatiza la ciudad, pues ya ha sufrido en sus carnes denuncias sindicales las cuales le habrán servido para que se de cuenta que el látigo negrero solo valió para que Kunta Kinte se llamara Toby. Aunque visto lo visto debe de estar corroído por dentro y rebuscar por donde sea para llamar la atención a un trabajador de Cádiz.
Pues aquí tenemos la unión de la intransigencia y de lo que no consideran moral, con la falta de simpatía hacia lo gaditano. Y mientras seguiremos en boca de todos por las continuas prohibiciones, prohibido ponerse en pelotas en Cortadura y prohibido contar chistes en La Caleta.
Y eso que vamos a conmemorar el dos mil doce, ¿Qué ocurrirá a partir del dos mil trece?
Salud y libertad
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8 comentarios:
Viva Cádiz libre, viva la libertad de expresión, Juan todos los gaditanos autenticos estamos contingo.
Un abrazo
Que injusticia más grande... que se venga a camposoto y que se vaya a la caleta el saborío que temos aquí...
¡Que verguenza!, que porque una persona trabaje con buen humor y con alegria, sin ofender a nadie, ni nada por el estilo y sea amonestado en su trabajo es de verguenza. Lo que ocurre es que los hay que son unos amargados y unos insociables y no tienen el arte que hay que tener para ponerle al mal tiempo buena cara, es decir, ya que tengo que trabajar hacerlo lo mas ameno posible. Por mi parte Juan tiene todo mi apoyo y que le quede claro "a quien corresponda" que el no ha echo nada malo, que a nadie le ha sentado mal y menos en la Caleta y que debería de aprender a ser un poquito menos amargo y a tener buen humor. Y como ha dicho el Canoso, que Juan se venga a Camposoto con nosotros, que lo acogeríamos con los brazos abiertos.
Un beso:
Inma
!No me lo puedo creer!
Hay que ser saborio,deberían ponerlo en la Victoria.
Todo mi apoyo a Juan.
Desde luego que el Ayuntamiento se preocupe de problema tal, dice mucho de los que lo Gobiernan.
En Valencia nos gobierna un partido popular, rancio, decimonónico, catolicista radical, etc...
Hace poco la alcaldesa Rita Barberá se enfrentó a toda la oposición en Pleno, para no quitar el título de Alcalde de Honor al dictador Franco, como con eso en todo lo demás.
Ánimo.
Gracias a todos en especial a los nuevos que comentan o visitan este blog.
Hola Paco:
No dejes de leer esto, viene en relación a este post.
http://pepecontreras.blogspot.com/2009/08/el-cachondeo-caletero.html
Gracias Ana, voy a poner aqui el mismo comentario que le he puesto a pepe.
"Pero este trabajador nunca dió una noticia falsa, lo único que hacía es poner una coletilla simpática a sus frases.
Ademas, si eso no lo entienden los de Europa, pues que usen su bandera para eso mismo que estamos pensando. Mientras que la playa posea unos servicios adecuados y de categoría, valdría esa negación para poner una bandera que diga playa de "cadi cadi" que seguro que tiene mas valor que todas las azules que pululan por las costas europeas.
Al bicicleta, si ha sido el que se ha quejado, hay que recordarle otras cuestiones de seguridad y salud en edificios publicos, que eso si que es un chiste malo, malo de solemnidad.
Por cierto, ¿cuantos accidente provocó el guardia urbano que dirigía el tráfico cual bailarín de fama?. Se jubiló dirigiendo el tráfico de esa forma peculiar.
Presumimos en Cádiz de cuna de la tolerancia y la libertad.
Salud"
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