Mucho se está escribiendo sobre lo sucedido en Sevilla la pasada "Madrugá", unos magnificándolo, otros que le quieren quitar hierro alegando que son hechos puntuales y que no obedecieron a nada puntual, y otros, los que lo padecieron en propias carnes totalmente indignados, y mientras tanto la casa sin barrer
Por un lado las Cofradías sevillanas se han apresurado para tener un protocolo de actuación ante posibles repeticiones en años venideros, dándole un toque de cordura a todo este asunto, y otros los poderes sociales y económicos que anteponen su beneficio ante todo, y pretende que el debate acabe como que fueron simples carreritas, no yendo mas para allá del motivo, ni de las carreritas, ni lo que acabó siendo en un tsunami humano, independientemente de que sea provocado por unos desalmados o fuera el fruto de una confusión, acto que condujo a la gente a salir, literalmente, pitando.
El debate debe de afrontarse, tanto en Sevilla, como en Cádiz u otras localidades a donde las aglomeraciones pasivas se puedan romper de forma hecatómbica que conduzcan al terror e histeria colectiva, y es lo que creo que está pasando en la ciudad hermana, no quieren que el debate acabe con el que el turista deje de ir a esa ciudad y por ende la perdida de una fuente importante económica, que es una base principal de la economía de la ciudad sobre todo en estas fechas, pero no debe de ser un todo.
Esto me recuerda como, sobre el tema de un posible maremoto en nuestras costas, nos dicen que las autoridades no ponen en marcha un protocolo de actuación ante esa posibilidad, aducen que por no alarmar y que esta repercuta sobre el turismo en la zona, pues es lo mismo en otro contexto, o por lo menos me da la sensación
Lejos de buscar una pre solución a una posible repetición introduciendo en el debate a todas las fuerzas sociales de la ciudad, leo como, que es un hecho puntual, casi queriendo zanjar el tema, con burdas excusas y buscando un culpable, lejos de, ya no prevenir, pues son hechos imprevisibles, si no, de tener informada a la ciudad, con las medidas a seguir si, y esperemos que no se den, se volviera a dar esta situación.
Mientras tanto, mientras que hacen ver que no ha pasado nada, se pierde tiempo en trabajar y debatir, que parece que da miedo se hable o se debata, traten a la ciudad organizadamente y no a los ciudadanos como manada.
Y si hay que tomar medidas que no gustan, pero son importantes para la seguridad de las personas y de la propia ciudad, se toma, las gestiones públicas no es solo dar subvenciones o arreglarnos las calles, hay medidas antipáticas que son las difíciles de tomar, pero son las mas beneficiosas para la ciudad.
Del mismo modo y a lo que me toca más directamente, insto a la comisión de seguridad de Cádiz comiencen igualmente a trabajar sobre estos asuntos sobre todo en estas fechas donde cualquier medida preventiva por menor que sea, sirva principalmente para tener una ciudad segura para los ciudadanos
Salud y libertad
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