La lupa que observa a los blogs

No hace mucho, una persona que conozco y que está metida en la política me enseñó un determinado documento. En ese documento se hablaba de ciertas personas, todas conocidas y de las que repercutían negativamente sobre el partido del político que menciono. No se trataba de mi blog ni de ninguno cercano a mi, pero me dijo sin decírmelo, que todos los blogs que no son del partido de turno, son leídos y mirados con lupa. Al enseñarme ese documento me dijo, -“Paco, todo está controlado, controlan todos los movimientos y posibles traspiés, que bien puede valer para acabar en una denuncia, o bien no, pero…..”

Y yo en su momento me lo creí y no lo puse en duda, pues ya sabía el tema de una denuncia del gobierno popular de Cádiz contra mi sindicato, en el cual parece ser pedían que retiraran de su blog unas acusaciones contra el gobierno local, y mas adelante el Psoe denunciaba a sus propios militantes que hacían su blog y dejó entrever la mayor vergüenza de la “izquierda” Socialista disfrazada de Román o de Chiqui Peralta.

A todos estos controles que tenemos de los partidos capacitados para ejercerlo, hay que preocuparse ya no de hilar fino para tildar como a lo mejor se merece el político de turno por su gestión, si no porque es nuestra obligación. Los blogs son propiedad de sus administradores y somos, independientemente de los responsables de nuestras opiniones, los de velar porque una opinión aunque sea con nombre y apellidos, no constituya o sea una falta o delito contra alguien. Ya existen condenas que acusan a los administradores de determinados blogs a la sanción administrativa correspondiente, por permitir en, lo que es su propiedad virtual, comentarios no adecuados.

Así que, si algunos blogs son seguidos con lupa por pertenecer a un ideal político contrario, si ese mismo es de alguien que no comulga con el partido que gobierna pero son los que rigen y dirigen su administración, flaco o nulo favor hacemos los comentaristas en poner en el aprieto al no admitir un comentario que pueda provocar, desde una simple falta de un día de arresto domiciliario hasta una sanción administrativa en su trabajo si este es trabajador de esa administración, que puede acabar hasta en la perdida de su empleo, si llegara este caso.

Ya no es por joder a un partido o a otro, ya es por sentido común.

Salud y libertad