La Saeta que cantó Francis una Semana Santa, (de cadi cadi)

Francisco Javier Rodríguez Caballero, "Francis" para mas seña es un amigo de estos que conoces por algo determinado, y de esos que aunque de tarde en tarde veas te alegras de saludarlo.

Siempre he creído que tenía mas poca vergüenza que dinero, estuve todo un año con el en el colegio compartiendo aula y compañeros de clases. En ese año nos reíamos de todo y de todos, mas adelante las circunstancias nos hizo que saliésemos juntos en carnaval, concretamente en la comparsa juvenil Capa y espada en el año 1985. A partir de ahí él comienza una exitosa carrera carnavalera, primero como comparsista y luego chirigotero con la de Manolito Santander, pero no por dejar de vernos hemos dejado de ser amigotes.

Nunca le he conocido ningún desprecio a nada, por lo que sigo pensado que es respetuoso con todo, y en este caso con la Semana Santa que es a lo que quiero hacer mención. Aunque cuenta que un malentendido le provocó una de las situaciones mas desagradables que padeció él en plena calle, concretamente viendo pasar por San Pedro a la Cofradía del Ecce- Homo. Cuenta que vio a Migue el del bar Los pabellones vestido de romano haciendo malabares a lo “majoret” con la lanza. Le entró la risa floja hasta que un penitente con un farol se le acercó y le dijo que eso no era el teatro Falla. Francis no dándole importancia a ese comentario del oculto penitente creía que al conocerle era todo broma y seguía mirando y riéndose de las cosas que hacía el “romano”. Pero no era broma cuando el mencionado penitente del farol reanudó su marcha, dice Francis que si no tiene reflejos y no quita el pie, literalmente se lo revienta…. Y que por esa tentativa de lastimarle se fue a por él tipo del farol recriminándole su actitud y por supuesto liándose la de Dios en mitad de la calle.

Pero a lo que voy, Lunes santo, recogida de la Cofradía del Nazareno del Amor, año…. podría ser el 1985, la hora posiblemente mas allá de la media noche. Comienza la parafernalia de la recogida con la plaza llena de gente esperando, cuando de pronto llega el paso del Cristo y se escucha como la gente empieza a mandar a callar al resto pues alguien está cantando una saeta, termina la saeta, al gente aplaude y prosigue la procesión, todo normal ¿o no?

Podría ser normal, pero lo que verdaderamente ocurrió fue lo siguiente, Francis, después de tantas horas de cachondeos con los amigotes estaba un poquito alegrote, y claro como en Semana Santa hay que ver Semana Santa, pues nada ahí estaba el tío.

Y sin pensarlo cuando llegó el momento, y como a él no se le da nada mal los cantes, espontáneamente comenzó a cantar.

“Como el que echa al mar su anzuelo
aun mantengo la esperanza
de que entren barcos en puerto
y no vivir de esta añoranza”

Para quien no lo sepa este fragmento pertenece la presentación de la comparsa de Antonio Bustos, “Los Pimpis de Cai”, la cual interpretaba magníficamente el catalán. Y años después fue interpretada por el amigo Francis emulando una saeta. Pero lo mas curioso es que fue hasta aplaudida. Si queréis escuchar el fragmento original y poneros en orden, ahí va.

Salud y libertad